sábado, 14 de mayo de 2016

Cosas con las que no me perdería en una isla desierta






Los papeles de Panamá. La evasión fiscal. Los evasores fiscales. Los paraísos fiscales. La semana de mentiras de Soria. Bertín Osborne. Los señoritos andaluces.  Los “patriotas” con cuentas offshore.  Los bancos de Andorra. Las cuentas en Jersey. Jordi Pujol. Raphael.  Las amnistías fiscales. Los greenlings. Montoro. 


Falange. Los falangistas. José Antonio Griñan. Felipe González. La cal viva. El Gal. Los fondos reservados. Barrionuevo.  Bono y la unidad de “su” patria. El Batallón Vasco Español. El terrorismo de Estado. Las chaquetas de pana. Los que fuman puros.  


Fraga Iribarne. Alianza Popular. El franquismo con Franco. El franquismo después de Franco.  El Partido Popular. El Partido Podrido. Mariano Rajoy. Cospedal. Un fascista de portavoz.  Las cajas B. Albert Rivera. Todas las derechas camufladas del mundo incluyendo las catalanas. Las mayorías absolutas del PP. Todas las mayorías absolutas. 


Los pijos. Las pijas. Los caballistas en Feria. La gomina. El señoritismo.  Los que beben manzanilla sin bajarse del caballo.  Los diputados que tampoco se han bajado del caballo. El “ABC”. “La Razón”. Los lectores del ABC y la Razón. Marhuenda. 


El Borbón. La Borbona. La tía del Borbón. Todas las coronas y todos los tronos del mundo. Las cacerías de elefantes.  Todos los golpistas del mundo. Todas las Corinnas del mundo.


La corrupción. Los corruptos. La rata y el Rato. La Rita. El bizco de Castellón. La Gurtel. Los ERES. La Púnica. Esperanza Aguirre. Manuel Chaves.  Camps, Cotino, Fabra y su puta madre. Blesa. Las tarjetas blacks. 


Canal Sur. Susana Díaz. El ratón de Susanita. La California de Europa.  Los terratenientes. Los terratenientes nombrados “hijos predilectos” de Andalucía.  Los “andalucistas” de un solo día al año.  Los 37 años de Gobierno de un partido en Andalucía.  La ruina, el hambre y el paro que hay en Andalucía después de estos 37 años.  Si no me votas no te doy el PER.  La rosa sin el puño. La “Rosa”.

Los “populares”. Los “sociolistos”. Los felipones. Las feliponas. El Telediario de la 1. Las noticias de Canal Sur.  Sálvame. El Gran Hermano . 

 La madre que los parió

martes, 10 de mayo de 2016

García-Margallo, “El Cuatro Pueblos”








¿Qué puede hacer el biznieto de un general africanista cuando tiene 16 años? Pues apuntarse a las “Juventudes Monárquicas”.  ¿Y más tarde? Pues ingresar en la órbita de los jesuitas y estudiar en el colegio San Ignacio de San Sebastián.  Luego, como estaba cantado, seguir estudiando en Deusto, Derecho y Economía.

    ¿Qué hacemos con un joven facha, familia de militarotes, captado por los jesuitas?
    Pintarlo de demócrata.
    Sí. Los de la UCD tragan con todo.
    Bueno, lo haremos Inspector Técnico Fiscal del Estado. Tiene los enchufes necesarios.

José Manuel entonces estaba muy preocupado por el “Estado de Bienestar” y apostaba por el “europeísmo” y el “bienestar”, que como se sabe son dos cosas que han acabado en la basura de las mentes. Y tan chulo él, hizo una tesis que una universidad que curiosamente se llama “Miguel Hernández”, de Elche, se la premio como doctoral.

Bebió de las ubres de Areilza y Pío Cabanillas, “jesuísticos” como él y se metió en la política de altura camuflado de centrista.

No le duró mucho porque al poco tiempo ya estaba como diputado pepero por Valencia, cuando el PP había pasado de ser un invento con tirantes a ser un partido con su caja B y todo.

    ¿Usted cree que Fraga es un demócrata?
    No, pero usa tirantes y arranca los teléfonos.
    Procure no salirse de la ética. ¿Qué entiende usted por moral?
    La moral es un aceite refinado que sirve para que funcione el motor del capitalismo.
    Usted será Parlamentario Europeo y luego Ministro. Lo tiene todo muy claro.

Entonces de “europeísta” paso a “patriota”, que son esos señores que juran la bandera y besan su escudo mientras evaden sus impuestos a las Islas Cayman.  Y estuvo  entre Aznar, Rodrigo Rata, digo Rato, y un gallego malafollá, hasta que  fue nombrado ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación del Gobierno de Spain.

Ahí está (o estaba) hasta que se le ha ocurrido decir: “Nos hemos pasado cuatro pueblos con la austeridad”. Y aunque al día siguiente dijo que se habían malinterpretado sus palabras y el sujeto de su oración –lo dicen siempre- el que dijera que el “Gobierno no sólo ha sido bueno sino santo” no le va a valer de mucho. Y acusado de ser un “quintacolumnista” de Podemos, tiene menos futuro como ministro que un pastel a la puerta de un colegio.

    ¡Que se lo devuelvan a los jesuitas que aquí manda ahora el Opus!
    ¿Más todavía?
    Nada de populismo y extremismo.
    ¡Pero si es más de derechas que don Pelayo!
    Sí, pero tiene la boca floja.

Así que ahí lo tienen.  Tiene que vigilar su lengua y no meterse el dedo en la nariz. . Desde la calle.

miércoles, 4 de mayo de 2016

El ataúd pasará por tu puerta el 26-J







Por su falta de fe en la izquierda, Pedro Sánchez se tuvo que retirar con el rabo entre las piernas  a contemplar como Susana Díaz  le crece como un hongo venenoso en su cortijo de Andalucía.

Fe inmarchitable que tiene Mariano Rajoy, tumbado a la bartola, viendo pasar por su puerta los cadáveres de sus enemigos. Él sabe que a pesar de la diaria cosecha de embutidos existente en su partido,  en este país o establo hay entre seis y siete millones de ciudadanos a los que la corrupción, el abuso de poder  y la evasión fiscal les parece pecata minuta.

Las cifras que expresan esta profunda crisis económica son abstractas, porque en realidad la crisis no es económica sino moral. Siete millones de votantes  dan su voto a una opción electoral que lleva años financiándose en negro, rigiéndose en cuentas en B y recortando los derechos de los ciudadanos.

Esto es una hecatombe general pero se reduce a un drama íntimo, no hay frontera entre el bien y el mal, a pesar de una teórica conciencia cristiana y religiosa. Es admitir una sociedad de malhechores y que además sean los que nos administren. Los enterradores triunfan en tiempos de epidemia. Esta “masa” está dispuesta a enterrar a todos los demás con tal de seguir viendo su tele basura y los goles de su equipo.

 La crisis económica crea un estiércol muy hondo que alimenta a toda clase de ratas y carroñeros. No hay más que ver la televisión los sábados por la noche. En este momento alguien está ganando mucho dinero, defendiendo como “comisarios” a esos gobiernos y a esa “base social”.

Pero hay que resistir.  No puedes hacer como el Pedrito, que se acojonó con los barones de su partido, afincados en la derecha real.  Hay que volver a los valores de la izquierda. La crisis y el mercado de embutidos pasarán.

Y puede, que con la fe del optimismo, veamos algún día las cárceles llenas y a los siete millones reconvertidos a una realidad electoral justiciera. El pueblo, a veces, tiene una justicia que estremece. Mussolini fue arrastrado por las calles de Milán tras su caída.

Yo casi me conformo con que  alguien le afeiten la barba en público.

jueves, 28 de abril de 2016

El apocalipsis que viene








Los griegos antiguos llamaban “averno” a una tierra sin pájaros. El mundo que vivimos sería cualquier cosa ahora mismo menos un “averno” o “infierno”, porque lo que abunda son, precisamente, una  plaga de estas aves. O “pajarracos”. 

No cuesta demasiado trabajo imaginar que después de las elecciones del 26-J, la “gran alianza”, con Rajoy de presidente, volverá a gobernar este país, o desgracia colectiva.  Que después de las presidenciales norteamericanas de noviembre, Donald Trump será el premier estadounidense, lo que puede hacer que en marzo o abril de 2017 le haya declarado la guerra a Corea del Norte y en septiembre a Irán. 

Siguiendo con la imaginación de lo probable en Hungría, Finlandia, Ucrania y Macedonia habrá gobiernos nazis y Marine Le Pen será la presidenta de Francia. 

El gobierno español y españolista de Rajoy, Susana Díaz (Pedro Sánchez estará haciendo calceta) y Albert Rivera nos recortará 4.000 millones en sanidad, educación, prestaciones de desempleo, pensiones y servicios sociales, las comunidades autónomas y los municipios se verán reducidos a la mínima expresión y tras las oportunas mociones de censura, apoyadas por el Pasok –quiero decir PSOE- Esperanza Aguirre e Inés Arrimadas serán las alcaldesas de Madrid y Barcelona. 

El Ejército español participará en los conflictos contra Corea e Irán en “defensa de la civilización”, resucitaran a las momias de Franco, Fraga y Blas Piñar, habrá una nueva amnistía fiscal, se borraran todos los datos de los “papeles de Panamá” y será penado con cárcel hablar o referirse a ellos en cualquier medio escrito, televisivo o radiofónico y Juan Luis Cebrián será nombrado ministro de Información, mientras Felipe seguirá fumando puros en su yate. 

Se indultará a Bárcenas, Rato, Rita y 37 más, y Susana Díaz será vicepresidenta de Gobierno para “defender los intereses de Andalucía”. Se volverá a proyectar el No-Do y al inicio y final de los telediarios se emitirá el himno nacional que habrá que escuchar puestos en píe y el Real Madrid volverá a ganar todas las ligas. 

Yo ya he hecho una trinchera en la que aparte de todas las grabaciones de Enrique Morente, Omar Faruk, la V de Mahler, un libro de artículos de Manuel  Vicent, la trilogía en vídeo de “El Padrino”, una camisa de hilo, un pantalón vaquero corto, un sombrero de paja  y mi gato “Veletta” no quiero nada más. 

Que le den por culo al mundo al PP, al PSOE, a Ciudadanos… ah, y a Montoro, Rajoy y a Donald Trump.

martes, 19 de abril de 2016

Los ricos también lloran y tampoco pagan impuestos






Dejando a un lado a Aznar, que habita en el espíritu ascético de El Escorial, hasta que Darwin estableció la teoría de la selección natural de las especies los ricos no lloraban. Ahora, ya sabemos que tampoco pagan impuestos. 

Desde Pilar de Borbón a Corinna, pasando por Bertín Osborne, un ministro compulso-mentiroso, la familia Domecq, la rata de Rodrigo, hasta el entorno de Felipe, Raphael, Bono,  Cameron de la Isla, el primer ministro islandés y un huido de Pakistán se dedican a chotear a los respectivos fiscos de sus pueblos y países. 

Si no tuvieran bastante con las amnistías fiscales y las sicav al 1 por ciento, tienen a Panamá, Bahamas, Jersey, Niue, Gibraltar y todas la “ingeniería” fiscal de despachos, bufetes y asesores para no contribuir con un céntimo al erario público, ese que intenta sostener a los hospitales, los colegios y las carreteras que hacen que sus países no sean selvas donde Tarzán Rodrigo de sus saltos mortales, saltando de mitin en liana, pedagógicos y ético- tóxicos y tal. 

Todos son “muy patriotas”, tienen en sus muñecas y en filo de sus camisas de seda, pulseritas bicolores, se le hinchan las cuerdas de cuello defendiendo la “unidad” de la patria, alaban a Franco o a Fraga, votan a Rajoy o a José Mari, les toca la “lotería” siete veces en un año y dicen que un canario flauta ha puesto muy alto el listón de la dignidad política dimitiendo tras pasarse una semana diciendo mentiras. 

Ahora, pagar impuestos no va con ellos. Esperanza Aguirre dice que “porque es política” los paga, que si no…Los impuestos son cosas de la plebe y de los horteras que no tienen cuentas en Suiza. Ellos, la casta divina, no atienden a esas menudencias. 

Con rolex de oro en la muñeca bailan sevillanas con la carita sonrosada del sol de febrero en las Bahamas, van por ahí en BMW exhibiendo billetes de quinientos y juran y rejuran la bandera –que no es de “su” patria, porque su única patria es la defraudación y el dinero-. 

Veo con asombro un vídeo de una escala del buque-escuela Juan Sebastián Elcano en Miami y como “los tres grandes”: Bertín, Raphael y Julio Iglesias acuden a jurar y besar la enseña nacional, pero es probable que momentos antes hayan creado siete empresas offshore y tres sicav, todo, todo, todito, “absolutamente legal”. como decía Al Capone.

Se despiertan con las noticias financieras de Japón. Bostezan y se rascan la espalda mirando los recortes y los desahucios que le hacen a su pueblo, pero se van a dorarse al sol del Caribe yanqui donde sus cuentas están a salvo de los piratas que se llaman solidaridad, servicios sociales públicos o declaraciones de renta.  

Llevan cuellos de pajarita y hombreras sin guata, siguen el régimen de melocotón con yogur y te entrevistan “en tu casa o en la mía”, pero se lavan la boca sin quitarse la navaja que esconden entre los dientes.

En realidad son unos desgraciados.  En cada perfume, camisa, bebida, raqueta, coche, crema, viaje, piscina, ordenador o pantalla de plasma dejan parte de su existencia. Su única filosofía-ideología real es robar, evadir, escurrir el bulto.

También lloran, pero nunca pagan impuestos.