viernes, 12 de diciembre de 2014

La crisis ya era “historia” (cuento chino)




Erase un país donde, de pronto, desaparecieron sus cinco millones y medio de parados. También desaparecieron sus cinco millones de pobres y los dos millones y medio de niños que apenas comían una comida al día empezaron a tener un problema de obesidad mórbida gonzalera.  

Todos los jubilados y pensionistas, desde aquel feliz día, proclamado por su presidente, comenzaron a percibir una pensión digna y no tener que pagar por sus medicinas, debido a que ya lo habían hecho en su largo período de vida laboral a través de sus cotizaciones.

Las entidades bancarias aplicaron la legislación supranacional que consideraba a la vivienda propia un bien esencial y no aplicaron los miles y miles  de desahucios diarios que hacían en los malhadados tiempos de la crisis y los rescates de sus agujeros con el dinero de todos.

Todos los hospitales públicos que habían sido privatizados o cerrados, reabrieron para formar una Sanidad Pública eficaz, universal y gratuita y los colegios públicos fueron ejemplo de una educación igualitaria, laica y cívica.

El Estado se hizo laico, de verdad, y las organizaciones religiosas se financiaron de sus feligreses, pagaban sus impuestos y devolvieron al erario público los innumerables bienes inmuebles que habían rapiñado, escriturado e inmatriculado a su mitrado nombre.

La Justicia volvió al principio de “todos iguales ante la ley” y su acceso también fue universal y gratuito. Los jueces juzgaron y condenaron, con rapidez y en corto plazo, a duras penas de cárcel  a los partidos corruptos, que se habían financiado ilegalmente y a los miles de sus militantes pillados robando, trinconeando y corrompiendo.

Desaparecieron los cárteles informativos, las cavernas mediáticas, que ocultaban y alteraban la verdad y las noticias, la televisión paso a ser culta y entretenida, y también desaparecieron los programas basura y el destripamiento hueco de los débiles mentales.

Las leyes laborales, basadas en el principio de equidad, protegían a los trabajadores, jóvenes, mujeres y ancianos. Los sindicatos eran pilares de sociedad y los derechos de manifestación, expresión, opinión y huelga estaban plenamente garantizados.

Las identidades de los pueblos, antaño oprimidas o sojuzgadas, pasaron a reconocer el derecho de autodeterminación, el de la propia lengua y tradición. Las leyes electorales garantizaron la proporcionalidad absoluta de las distintas opciones, se votaba y opinaba colectivamente sobre todos los temas de interés público y dimitían instantáneamente los políticos imputados o procesados.

Volvieron los millones de jóvenes e investigadores que estaban en el obligado exilio, la deuda privada de bancos y particulares fue sufragada por los que verdaderamente la tenían y habían producido, el déficit público no era equivalente al PIB, la Constitución garantizaba eficazmente el derecho al trabajo y a la vivienda y las grandes fortunas y empresas no defraudaban, como en los tiempos de la crisis, el ochenta por ciento de los impuestos que tenían que pagar.

Y, efectivamente, cuando el poder popular cortó el cuello a todos los ladrones, mangantes y mentirosos que habían producido la crisis, esta pasó a ser historia.


Y colorín, colorado, este Mariano está acabado. 

jueves, 11 de diciembre de 2014

Patriotas al coñac




“Madrid.- El expresidente del Gobierno español Felipe González ha recibido hoy en Bogotá la ciudadanía colombiana de manos del presidente Juan Manuel Santos, que lo definió como "un ser extraordinario" y amigo del país suramericano.”

“La familia Aznar-Botella plantea su futuro fuera de España, siendo Nueva York su lugar de residencia en los próximos años

(De la prensa nacional en un día de diciembre)


No se sabe muy bien si este es un país o un cubo de basura.  La pasión del poder, la usura política, la convulsión de la casta, convertida en un excremento extractivo o puerta giratoria, la representan a la perfección dos ex presidentes, desnudistas de una “patria” en la que siempre se envolvieron y que dejan al “patriotismo” en el borde mismo de los anti cuerpos.

González y Aznar, la alabada transición en forma de fraude, nos ponen al descubierto la monumental patología, el descarado engaño y la incomputable mentira de la política española en las cuatro últimas décadas.

No eran ni socialistas, ni de derechas, ni patriotas, ni víctimas del terrorismo, y no se sabe si tan siquiera fueron políticos: eran, simplemente, dos estafadores de la idea, dos consumidores de rentabilidad de dividendos internacionales a costa de una mezquindad de constituciones, partidos, transiciones y otras intoxicaciones al pueblo, a la sociedad civil y a los desgraciados e ingenuos españoles.

Han madurado su cosecha de ingresos mensuales en consejos de administración, comisiones de sátrapas, conferencias a la violeta y mariconadas de moderación, y ahora, caídas las caretas, no son ni patriotas. Salen corriendo camino del narco amigo o de la facultad consumista de créditos amañados y dejan la España, la que fue su “patría”, que dejan.

Seis millones de parados, cinco de pobres, una deuda superior al PIB anual y sus acólitos y continuadores sepultando jueces, pruebas, Eres y discos duros en la mayor impunidad. Huyen, como ratas que abandonan el barco, del país al que han esquilmado de ideología y de riqueza y no tiene el menor pudor en adoptar la nacionalidad de un país infectado por el narcotráfico o de una democracia que tortura en secreto y con violencia.

Su falso alegato patriótico queda en el mismo lugar en que se produjo: en la basura. El país que nos dejan en su obra magna: una basura corrupta, sin justicia ni ley.


Como ellos mismos.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Coplas al vitriolo




Granaína de la mitra

 “Sale el sol
alumbrando a toa la casta
y el obispo de Graná
esconde a los pederastas”



Fandangos para una aristócrata

“Eras la terrateniente
que empobreces Andalucía
eras un bicho viviente
aristócrata y arpía,
la ruina de las gentes.”



Tientos por cospedales

“Que por tu partido sale,
es tanta la corrupción
que por tu partido sale,
que dice la vecindad
ya está la Cospe en la calle.”






Soleá de la transparencia

“Presumes  de transparencia
y yo no lo entiendo así,
porque si transparente fueras
los ladrones de la Génova
no robarían allí. “

Sale el sol y da el cristal,
pero no quebranta el brillo,
¡Ay! ¿Quién lo apaga es Cospedal?




Granaína de los rayos UVA

Ana, te vi dimitir
aunque no tenías ganas.
En tu cochera, un festín
y la Gurtel fue tu cama,
de cabecera, un botín.




Tonás parlamentarias

“Se visten de transparentes
y yo me visto de negro,
y en pensar lo que han robao
las estrellitas del cielo se visten de colorao.”




Caña del monaguillo

“El que a Canarias viaja
a dormir en otro colchón
que se conforme con “una”
y le dé gracias a Dios.

Que se conforme con una
y que se le pague tó
que toito lo paga el pueblo
y va a dar un reventón”



Solearilla carcelera

¿Quién lo habría de notar
que Isabelita estuviera
en la cárcel por robar?




Bulerías de la fosa

“Debían de enterrar duquesas
con la tapita pa abajo
no fuera que resuciten
y se vayan al carajo”





Carcelera pa joderse

“A la cárcel te llevaron,
que te “jodas” digo yo
pues todavía está en mi oído

lo que tu hija largó.”

domingo, 30 de noviembre de 2014

Epitafios imaginarios de tumbas imaginarias





Luis de Guindos:             “Volveré, y seré millones, brothers, and Lheman.”
Cristóbal Montoro:        “El cielo estrellado sobre mí, los recortes sobre vosotros”
Felipe González:             “Esta puerta no gira”
José María Aznar:          “Aquí yace un arma de destrucción masiva”
Alfredo P. Rubalcaba:    “Desaparecido en combate, apareció aquí”
Jordi Pujol:                     “Una tumba no es suficiente para un banco”
Manuel Chaves:             “Aquí yace una cabeza como el escudo el Barça”
Fátima Báñez:                “Aquí yace la dignidad de los trabajadores”
Cayetana de Alba:          “Me he vuelto a casar, ¡Satanás, cariño!”
Isabel Pantoja:               “Omo lava blanco”
Miguel Ángel Rodríguez:”Toi bodacho”
José Antonio Nieto:        “Abrid esta tumba, al fondo hay un obispo”
Soraya S. de Santamria: “En realidad no estoy muerta, solo vicemuerta”
Ana Mato:                      “Mi lucrativo viaje acaba aquí”
Francisco Granados:      “Prefiero estar en Ginebra”
Emilio Botín:                  “Me debéis un gusano”
Ignacio Wert:                 “No sé qué hago aquí”
Artur Mas:                      “Perdónenme, me estoy separando”     
Kiko Rivera:                    “Aquí sigo descansando”
Jauma Mata:                  “Allí donde estuve todo era Palma. Y Arena. “
José A. Monago:             “Disculpen el polvo”
Francisco Camps:           “Fui un ejemplo, lo dijo él”
Íñigo Errejón:                 “Mi vida fue una beca”
Antonio Gala:                 “Murió vivo”
Rita Barberá:                 “Gané más que nadie”
Pablo Iglesias:                “Si se puede”
Juan Carlos de Borbón:  “¿Por qué no te callas, elefante?”
Carlos Fabra:                  “Sólo veía la mitad, ahora no veo nada”
Adolf Hitler:                   “Parece que se ha ido, pero no te fíes”
Manuel Fraga:               “Odiado por sus enemigos, temido por sus amigos”
Francisco Franco:           “Arrebató la libertad al pueblo y se murió de asco”
Mariano Rajoy:              “Aquí descansa él, y en España descansamos todos”

Y uno hermoso y real:

César Vallejo:                 “He nevado tanto para que duermas”.



sábado, 29 de noviembre de 2014

La Mato no mata, participa lucrativamente



España es una tierra de promisión sembrada de corruptos, que suele ofrecer buenas cosechas. Una vez, en Valladolid, -con “uve” y no con “efe”- se produjo una de estas. Y de allí surgieron desde iluminados con bigote, borrachos al volante y panteras, digo jaguars, de la política.

José Mari había cazado al ojeo una bandada de cebollas con bolsos de Vuitton. Y a la “pequeña Nicolasa” cuando venía de su sesión diaria de rayos UVA. Por eso no extraña que nuestra protagonista, además de tener débil la mano y la bolsa de recibir regalos, también tuviera floja la boca: “los niños andaluces son prácticamente analfabetos” dijo aquella lumbreras, hija de un alférez de navío.  Todo el resto de su vida le ocurrió igual.

             -¿Qué le vas dejar a los dependientes, hermosa?
             -Pobres, están descarriados por la atrasada política social que se ha llevado a cabo.
             -¿Se les mata a recortes y atrasos en los pagos o los privatizamos, también?
             - A mí lo que me preocupa es ver como visten a mis hijos cuando van colegio.

Este fenómeno de la naturaleza siguió impertérrita, entonces dijo: “«los niños andaluces impartían las clases en el suelo” y aquel día no cagó.  Cuando su casa y su garaje empezaba a llenarse de coches de lujo, -que ella no veía- y cuando su entonces consorte le parecía ya más a don Chicho que a Blas Piñar – y eso que se parecía a ambos-  a aquella Nicolasa la nombraron ministra. Nada menos que de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

Y pasó lo que tenía que pasar: que nunca la sanidad fue más insana, nunca hubo menos servicios sociales y menos igualdad.

-           A ver, Anita, si eres capaz de decir de una tacada: Te-ra-pé-u-ti-co.
-           ¡Carchuto!
-           Que no hija, que no es cartucho, que es terapeútico.
-           ¡Frigorífico!
-           ¡Mi capitán, la recluta es tonta del culo!
-            
A pesar de estas dotes de competencia, su jefe –amigo- la defendía a barba, trote- de trotar en Pontevedra- y espada.  Y ponderaba sus virtudes competenciales y intelectivas que nadie veía. “Llegará muy lejos” dijo el de Pontevedra, leyendo el “Marca”. Y si, claro, fue hasta Disneyland, pagando un señor con bigote con el que coincidió en una boda de una de las hijas de Al Capone, digo de un señor bajito con bigote que cobraba comisiones en Libia.

A Anita le gustó mucho aquella gala con lo más granado –incluido Paco- de los corleones genoveses del país, o quinta de recreo, donaciones y sobresueldos, de la cosa nostra.  Tanto que contrató a los payasos y a los confetis para una comunión que tenía que celebrar. ¡Qué emoción, todo tan in, y adema gratis! Total, pagaban otros con “bigote” y “correa”.

             -¿Sabe usted porqué metieron en el trullo a un tal Alfon, en el siglo pasado?
             -Le regalarían muchos jaguars y viajes dorados.
             -No, señorita “No me consta”, porque hizo mal la declaración de la renta
             -Uff, me voy que tengo que “arreglar” la mía

Y en esto que estaba por allí el Ébola y, ni corta ni perezosa, se lo trae a Europa. Todo el mundo temblando, no de la extrema gravedad de la enfermedad, sino por quien era la responsable de gestionarlo. De Algeciras a Laponia todo el mundo cagaó.

El olor le llegó a Mariano cuando estaba tocándose la cara con un guante y entonces encargó del tema a un medio pollo aviar en forma de vicepresidenta.  Pero, que hacía con Anita. ¡La Mato, dicen que pudo decir! Y es que, claro, estaba llamándola. Como un juez con tupé, que no es que la llamara sino que la imputaba: Partícipe a título lucrativo. Mariano lo tenía a huevo. Así no se las ponían ni a Fernando VII.

             -Ana, eres más inútil que el rabo un  higo.
             -Mariano, déjame de diputada, con sus dietillas y eso, y dimito.
             -Bueno, ve y dile al Pujalte y al Floriano que te defiendan como ellos saben hacerlo.
-¿Sí? Va a salir a relucir eso de comer  jamón y robar  gallinas. Y voy a perder el bronceado.
             -¡Hija, peor lo tiene el Monaguillo!

El mundo sigue igual, dice Iglesias, -Julio, no Pablo-y  esta inútil de la “buena sociedad”, esta pija, modelo castellano, acostumbrada siempre a ver cómo le “visten y lavan el culo a sus hijos”  terminará sus días en un chiringuito en Marbella, tocándose la cara con un guante después de pelarse unos espetos a la brasa.


miércoles, 26 de noviembre de 2014

Versión de "¿Qué dirá el Santo Padre?



Miren como nos hablan de libertad
cuando de ella nos privan en realidad
miren como pregonan la transparencia
y nos roban millones sus “excelencias”.

Que dirá el Mariano
desde Galicia
si crecen los corruptos
y su avaricia.  

Miren como nos hablan del paraíso,
el Guindos y el Montoro
los dos mangantes,
y el paro tiene cifras espeluznantes.


Que nos dirá la Cospe
desde Toledo
si sus chorizos roban
con cinco dedos.

Los curas pederastas
están muy tranquilos
abusan de los niños en sus cojines
y se tumba en el suelo, Javier Martínez.

Que nos dirá Bárcenas
desde la cárcel
si el señorito Arenas 
es de su “cartel”.

Entre más injusticia, señor Fiscal,
defender a la Infanta
en vez de acusar
y las leyes se pone
en el ojal.


Que dirá el santo padre
que vive en Roma
que le están degollando

a sus palomas

lunes, 24 de noviembre de 2014

La casta



Roban, corrompen, compran, venden, descomponen, bendicen, destrozan, esquilman, desvían, poseen, aflojan, acuerdan… la casta.

Lucen, maldicen, piden, obtienen, abrevan, abusan, satisfacen, muerden, roen, corroen, acoplan, enganchan, reparan, lavan, humillan… la casta.

Chupan, matan, procuran, pican, hacen, intoxican, emplean, mueren, recolectan, desmesuran, arden, pederastean, violan… la casta.

Descontrolan, claman, alardean, palpan, votan, reprueban, absuelven, desprestigian, emborrachan, mean, reducen… la casta.


Reducen, silencian, enfrían, engullen, tarjetean, destiñen, aprietan, blasfeman, acompañan, osan, terminan, desnudan, adoban, afilan, preconizan… la casta.


Ocultan, secretean, obvian, exponen, escriben, asilvestran, espacian, salvan, condenan, convierten, cagan, follan, anhelan… la casta


Politiquean,… la casta.


Son... la casta