lunes, 14 de septiembre de 2015

Cifuentes y la vergüenza





La presidenta de la Comunidad de Madrid, Cristina Cifuentes, ha dicho en relación a la celebración de la Diada en Cataluña el pasado viernes, que fue “un espectáculo vergonzoso”.

Resulta obvio que en su idea particular de la “vergüenza” y lo “vergonzoso” hay mucho de subjetividad y algún componente –no medido- de roña intelectual y política.

Calificar de “espectáculo vergonzoso” una concentración cívica de millón y medio de personas, modélica en su desarrollo, pacifismo y organización, va mucho más allá de una simple falta de respeto a las normas no escritas de la democracia y sitúan su irritado desprecio en la órbita pura y simple del fascismo congénito que le caracteriza.

El desapego mental de la desafortunada walkiria pepera se produjo en el desarrollo de un mitin de su partido donde compartía estrado con un significado exponente de la ideología racista, inquietante y filo nazi que representa la inmundicia en forma de candidatos a los que se ve abocada su “partida”  o mafia en Catalunya.

Es decir que la señora Cifuentes, que tiene a su marido en situación de busca y captura por un quítame allá unas cuentas sin declarar ante un juez, siente vergüenza porque una muchedumbre ingente y festiva reivindique sus señas de identidad en calles abarrotadas y  no tiene “sentimiento” alguno por militar y ser cargo público de un partido que expolia, defrauda, se financia ilegalmente, se administra en “cajas B” y tiene procesados a sus cinco últimos tesoreros.

Hasta para despreciar hay que tener meninges y la señora Cifuentes, que aplaudió y apoyó a un desastre mental, Botella por apellido, dijo también, para que no se le quedara nada en el tintero "Yo tengo una alcaldesa parecida a la vuestra, desgraciadamente".

Desgracia, enorme la nuestra ya que parece que los bomberos –ni los loqueros-   intervinieron y este mitin concluyó sin que fenecieran sus oyentes de estupor o de asco.


Vivimos en un país de detritus en el que es difícil encontrar la autoestima. Lo que ahora se ve en España no puede ya atribuirse ni a la inteligencia ni a la incultura.  Es un producto de escombrera fruto de la confluencia maligna de gentes como Rouco, Aznar, Belén Esteban, Rajoy, el programa “Sálvame” y una toalla estampada llamada Cifuentes. 

jueves, 10 de septiembre de 2015

Petra László y otras patadas en la boca.




No es ella, sino lo que representa. El encargo fascista de la violencia, la vaharada nazi con el ego crecido, la decepción de plomo de la falsa libertad.

Impunes naciones y organizaciones atlantistas se ha inventado guerras, bombardeado países, expoliado riquezas y han causado millones de muertos, de niños muertos en la orilla de la playa de nuestra/suya conciencia capitalista, de refugiados políticos y muertos de hambre de patera.

Y ahora se la cogen con papel de fumar para distinguir entre “refugiados” y “emigrantes”.  En el clamor de la foto del niño muerto a la orilla del mar de su vicio se han vuelto indulgentes, aceptan a centenares de miles de huidos de la guerra que ellos han provocado, mantenido, alimentado y militarizado, y se los reparten siguiendo las leyes de su imperio.

Pero hay otras patadas, otras zancadillas homologadas, aparte de la de la ardua fotógrafa nazi-húngara.  Los que “devuelven en caliente” a los asalariados del hambre colonial, por orden de un ministro monje de comunión diaria de un gobierno que legisla y multiplica por dos la pobreza y los multimillonarios. Los que instalan verjas con hirientes cuchillas para los pies y las carnes desnudas de la plétora de la miseria, los que disparan pelotas de goma a nadadores exhaustos, los que amparan a fascistas con uniforme y los esconden a los jueces, los que encargan la destrucción de pruebas e inventan mordazas en forma de ley.

Vivimos en el recinto de la hipocresía, del falso derecho y de la falsa democracia. Estas gargantas ácidas del fascismo de Estado, de los fabricantes-vendedores de armas a guerra-civilistas de su propia creación, son un “arma de destrucción masiva” de la humanidad, y del concepto de civilización y derechos de la persona. Te venden las bombas por racimos y amenazan a sus propios conciudadanos con sacarle los tanques por un quítame allá un “derecho a decidir”.

Son bastante semejantes. Primero se oponen, manipulan desde sus órganos de desinformación y lamedores perianales y si el “Imperio” habla en sentido contrario, acatan y comiéndose su asco los reciben a patadas y zancadillas en las fronteras.

Se les ve resoplando en sus telediarios, cometen yerros y aferrados candorosamente a sus momias con bigote y brazo en alto se declaran, grasientamente, “demócratas”. 

Pero a la mínima te esperan en la frontera a patadas o zancadillas.  O cara al sol con la camisa nueva.  O con una cámara de gas.


jueves, 20 de agosto de 2015

La pringue sale por las portadas





Probablemente estamos demasiado juntos, los políticos,  los periodistas, los corruptores,  o, los simplemente, gilipollas. Y esto, que, por proximidad, da calor, es realmente una pringue.

En este hacinamiento, salen  a relucir no ya la mezquindad obsesa, la ruindad de espíritu de por ejemplo, esa derecha casposa española que escribe y lee un panfleto al que con sólo con una alta dosis de humor negro llaman “La Razón”.

Así, en la pringue que chorrea a Marhuenda y sus llamémosle “redactores”, llevan tres días haciendo un ridículo eximio a propósito de la figura de la alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena.

Encabezar una portada con una “información”, o borborigmo de su director, sobre el “lujo sin límite” que tiene este “roja” que veranea en una mansión de millonarios que cuesta 4.000 euros a la semana. 

Ignorando –esa substancia parda que le llena desde los intestinos al lugar en que tenían que estar la meninges se lo impide- que es un costo compartido entre ocho personas, que, además, pagan de su bolsillo, sin que se lo sufrague ningún lobby empresarial, ningún ministerio vendido a los amiguetes ni han tenido que lamerle el culo –como hace él- a ningún presidente que no acaba de salir del almario.

Ignoran también desde su absoluta mediocridad mental que la anciana alcaldesa ni siquiera, aunque lo pagó, estuvo una semana alojada en tan palaciego recinto, -privativo según don Paco, de los chorizos y morcillas del partido que defiende a diario-, sino los tres tristes días de un puente festivo.

Esta pringue, digo este medio informativo, llega al paroxismo de la imbecilidad, cuando a los dos días de hacer ese humoral ridículo, vuelve a convertir la portada del medio donde mean y cagan los banqueros tapados de este país o establo, vuelve a cagarla publicando que doña Manuela ha cortado una flor prohibida, la  Pancratium Maritimum, un horrible crimen, creo, digno de ajusticiamiento en una cuneta, sino fuera porque en Andalucía, lugar del asesinato, la flor en cuestión no está protegida.

Don Paco Pringues se olvida eso sí, que una ley de Montes y su aprovechamiento tras un incendio, elaborada por sus amiguetes diputados del partido que lo condecora de cuando en cuando  –aquí forman un lobby corrupto hasta los madereros- ha provocado en lo que llevamos de verano el doble de incendios de un año normal y que su conciencia ecologista adoptada, no ha dicho ni “mu”de esto  ni en portada ni en la entrada a la flor de su culo.

Este es un ejemplo eximio de la naturaleza y condición de la derecha que tenemos en este país, y este periodista con carnet de tómbola, no deja de ser un coherente reflejo de la situación general.

Estamos tardando demasiado en terminar con este engrudo de falsos, con este guiso de chorizos al vino. Más que una sociedad en cuya interacción se fuera eliminando la mediocridad como un escombro, la realidad se demora en estos guisos de gallinejas fascistas.

El “ABC”, “La Razón”, “Intereconomía” dan el pego como “medios informativos” y sólo son el reflejo en forma fétida de la España de charanga y pandereta, cerrado y sacristía, monteras, tricornios y toros de la Vega, curas presidiendo el pelotón de ejecución y una mierda pinchada en un palo como “tertuliano” y director de un periódico.

Adentro se chapotea.



miércoles, 12 de agosto de 2015

Escena del diván. Fragmento del "Tenorio Mariano"




Cálmate, pues, marquesa mía  
reposa aquí un momento          
olvídate del tormento  
de perder la mayoría.
               
¿No es verdad, ángel de amor,
que de Coruña a Sevilla               
robamos desde una silla
hasta la Cruz del Señor?

Esta Gurtel nos llena     
de pasta todos los sobres
de aquellos peperos bordes   
en ardorosa faena;        

esa Púnica morena          
que contrata sin temor
al alcalde pecador          
que marjaliza el día,      
¿no es cierto, Aguirre mía,         
que el PP lava mejor?  

Esa armonía que siento
recogiendo estos millones         
de Granados y sus “c…….”          
que agita el ayuntamiento,       
ese corrupto por ciento
con que hurta este “tenor”
de Madrid y alrededor  
Valdemoro y compañía.
                 
¿No es verdad, multada mía,    
que puedes aparcar mejor?      
 Y estas palabras que están       
filtrando insensiblemente         
tu hermosa cuenta corriente    
que en Suiza contaran 
y cuyos dígitos va           
inflando el  interventor
al partido estafador        
no juzgado todavía,      
¿no es verdad, Esperanza mía,
que están subiendo el mibor? 

 Y genoveses ufanos
que se lo llevan tranquilos           
sabiéndose tus pupilos
y alumnos del Mariano.              
Evaporarse, cristianos,  
que todas las cuentas B
yo nunca recordaré.
                 
¿No es verdad, colega mía,       
que ya no sientes pudor?          

¡Oh! sí, arrugada doña Inés,
 espejo y luz de mis ojos;           
escucharme sin enojos
como roban a manojos                 
y después salen por pies;
mira aquí a tus plantas, pues,   
todo el altivo cercano   
del Tenorio Mariano
al que la barba  crecía,  
en Galicia, terra mía      
mientras trotaba de amor.


DOÑA INÉS

Callad, por Dios,  ¡don Mariano!,            
que no podré resistir    
mucho tiempo sin morir             
el calor de este verano.

 ¡Ah! Callad, por compasión,     
que oyéndoos me parece          
que el Granados enloquece      
y cantata en la prisión.

¡Ah! Con lo de esta gentuza        
sin deciros que esté mal
ya me veo de reclusa 
en la de Soto el Real.
               
 Tal vez poseéis, Tenorio            
un misterioso amuleto,               
un mensajito secreto
oculto en vuestro escritorio.       
                  
Tal vez Satán puso en vos          
un cuerpo de Pontevedra            
el rostro como una piedra
trotando por el alfoz.
                 
 ¿Y qué he de hacer, ¡ay de mí!,              
si aparcando en la Gran Vía
yo perdí la mayoría
y oposición soy aquí?   

No, don Mariano mío   
resistirte no está ya;     
yo voy a ti, como va      
sorbido al mar ese río. 

Tu gobierno me enajena,           
tus palabras me alucinan,           
ya no piso la oficina
y mandando está Carmena.      

¡Mariano,  yo te imploro             
firma un decreto, ya, ahora,       
y me haces senadora
y cobro de ese tesoro!
               



jueves, 6 de agosto de 2015

Bando





Cordobeses:

La provincia está en peligro. Nuestra ciudad perece víctima de la perfidia pepera. Ciudadanos, acudid a salvarlas.

Señores justicias y ciudadanos libres de la ciudad y de los pueblos a quienes se presentare este oficio, de mí, bloguero y sin adscripción política.

Es notorio que los peperos, apostados en su mayoría absoluta en las Cortes y controlando el Ministerio de Hacienda por un jienenses anti cordobés, con una reiteración que ya dura todo su mal llamado mandato han tomado presa sobre la riqueza y economía de nuestro pueblo trimilenario y en todas las ocasiones que se presentan agravian y empobrecen nuestra inversión, situándonos en la cola de cualquier ratio económico del País y de Andalucía.

Por manera que a pesar de padecer los mayores índices de paro y pobreza, nuestras economías provincial y local no cesan de comprimirse y  está corriendo el sufrimiento entre amplias capas de nuestro pueblo más necesitado y vulnerable.

Somos cordobeses y es necesario que defendamos todo nuestro pasado y todo nuestro futuro,  reaccionando contra unos pérfidos que, so pretexto de gestionar la crisis, nos quieren imponer un pesado yugo, después de haberse apoderado del control de nuestra expresión cívica como ciudadanos en forma de mayoría de nuestros representantes.

Procedan vuestras mercedes, pues, a tomar las más activas providencias para escarmentar tal perfidia, acudiendo al socorro de nuestra Córdoba y provincia, vejada y ofendida por una partida mafiosa y corrupta,  y alistándonos activamente contra cualquier voto o candidatura del tal llamado partido de podredumbre, pues no hay fuerza que prevalezca contra quien es leal y valiente, como los cordobeses lo somos

El Pueblo  guarde a vuestras mercedes y a la Ciudadanía Libre muchos años.


Córdoba, 16 de agosto de dos mil quince. 

lunes, 3 de agosto de 2015

España y yo somos así, señor merengue





Tiene el cuello blando, como de ciego; vino al mundo de la empresa –y de los merengues- de píe.  El país, el gobierno, los ministros y el BOE parece que están pensados a la medida de su gestión de galápago anfibio, para que nunca pierda y siempre gane en sus “emprendeduras”.

Así, tres debacles o ruinas de gestión y empresa: el cierre del almacén submarino Castor, la quiebra de la desaladora de Escombreras y el fracaso de la línea de AVE, Figueras-Perpingnan, que hubieran supuesto el hundimiento, cierre e inhabilitación como empresario a cualquier mortal que no tuviera un palco milagroso en un campo de futbol o aquelarre mafio-pepero, a él la han  supuesto la indemnización de 1.500 millones del “estado” de su forofo del Marca y el merenguerío. Un tal Mariano.

A pronto pago y con pocos papeles justificativos. 900 kilos por mover con miles de micro terremotos toda la costa mediterránea, desde Tarragona a Alicante, 447 del ala por dejar sin agua potabilizada a toda la región de Murcia y 200 más por que el AVE franchute a Perpignan se quede en nada.



    -¿Y ahora qué hacemos?
    -Por lo pronto voy a poner al día mi cuenta bancaria.
                -Lo que tú digas, presidente. ¡Hala “Madri”!
                -Tú te haces el tonto y dices que sólo apoyas a la libre empresa.

Vivimos en un país hecho a medida de ciudadanos “ejemplares”, como Bárcenas, Rato, Blesa, Matas o Fabra. Emprendedores y tal. Que lo mismo le toca la lotería treinta veces seguidas que te sacan, sin moverse del palco, una indemnización de infarto por “soportar” una huelga de recogida de basuras, mientras “el equipo”, podrido de billetes y estrellas, gana dos Ligas en diez años.

Esta casta es una fiesta, que se hacen “diputados” para tocarse los huevos o para forrarse (Zaplana dixit) y que llevan a la rojigualda en la muñeca y a un general gallego en las neuronas.

En realidad son unos “románticos” de la política. Siempre nos están salvando de algo. Ahora nos han “salvado” de la crisis. ¡Si no llega a ser por ellos y su capacidad de gestión estamos comiendo mierda!

                -Mira usted, extremista, con el populismo no se hacen  negocios.
                -Sí, Corleone. Hay que ser serio, responsable y lamerle el culo a Ángela.
                -¡Todo un programa de gobierno!
                -Nos apoyan todos los “idiotas” que en nuestra historia han sido.
                -Si, por eso cenan juntos.

Ah, y a mí de mayor me gustaría llamarme “Florentino”



sábado, 1 de agosto de 2015

Parábola-cuento de las vacas, la leche y los lecheros




Había una vez un mundo lleno de vacas. Que daban mucha leche y anhídrido carbónico.  Los dueños de las vacas querían que toda la leche, o el dinero de su venta en el “mercado”, fuera para ellos, pero entonces los vaqueros –los que las cuidaban, alimentaban u  ordeñaban- se organizaron.

Hicieron partidos políticos y sindicatos y consiguieron trabajar –ordeñar- sólo ocho horas al día, descansar los fines de semana, tener derecho a vacaciones pagadas y justas pensiones de jubilación.

Los “lecheros”, ante el temor de no ordeñar a sus vacas o no vender la leche de estas, parecieron ceder. Pero en realidad no era así. Se inventaron palabrejas como la “globalización de la economía”, la “deslocalización”, el “neoliberalismo” y partidos trampa, llenos de lecheros y banqueros corruptos, que consiguieron desmovilizar y engañar a los pobres vaqueros.

Prometieron bajar el precio del yogurt y lo que hicieron fue privatizar la mantequilla, quedarse con las tetas gordas y embistieron con sus cuernos –los suyos y los de sus vacas- a los pobres vaqueros que se quedaron sin derechos, en paro o emigraron a países donde ataban a las vacas con longaniza y daban créditos de usura a las vaquerías sin pienso.

Tanto estrujaron a las vacas y a los vaqueros que un día,  hambrientos y desesperados, estos  acordaron una medida excepcional: ordeñarían todos a la vez a las respectivas vacas y dejarían derramar su leche –la buena y la mala- por todos los establos y bancos del mundo

Una corriente blanca inundó el globo, cubrió todas las montañas, troikas, bolsas y primas de riesgo del planeta y sólo se salvaron Veroufakis-Noé y su arca de dignidad. Perecieron, hechos margarina o batidos de fresa-euro, Ángela, Lagarde y Rajoy, con todos sus filisteos.


Moraleja: Cuanto más se estruja una vaca más posibilidades hay de que explote. O reviente.